Delfina Pignatiello ya estaba retirada, hace mucho tiempo. Para ser más preciso, desde el día 29 de Julio del año pasado. Delfina había nadado su segunda prueba en los Juegos Olímpicos de Tokio en la que terminó en 27º lugar entre las 30 nadadoras de la prueba de 800 libre. Fue 20 segundos más lenta que su récord sudamericano y terminó bastante agitada.
A la Argentina no le fue bien en los Juegos Olímpicos, los resultados quedaron todos distantes de las mejores marcas de los nadadores. La pandemia fue despiadada con los argentinos, piscinas cerradas, competiciones canceladas. Delfina fue muy, pero muy perjudicada con todo eso. Para completar, su pasión por las redes sociales también tuvo un precio alto.
Desde muy joven, Delfina siempre fue muy activa en las redes sociales. Ella tiene una increíble cifra de 756 mil seguidores en Instagram. Se la comparamos con los principales nadadores brasileros Bruno Fratus tiene 288 mil, César Cielo 216 mil. Hasta incluso las estrellas estadounidenses Katie Ledecky con 574 mil y Caeleb Dressel con 678 mil están atrás de la argentina. Si seguimos analizando a fondo, en Instagram, solo existe una nadadora por delante de Delfina, la DIVA, Federica Pellegrini de Italia con 1.6 millones de seguidores.
Y toda esta popularidad tiene un precio alto. Delfina nunca supo lidiar con los haters, los comentarios prejuiciosos y mucho menos las críticas. Durante la pandemia, llego a desconectarse de todas las redes sociales y por mucho tiempo no dio ninguna entrevista.
La campaña olímpica fue consecuencia de todo eso. Su cabeza ya estaba bien.
La fotografía, que ella cita en su mensaje de despedida en Instagram, fue una buena oportunidad. Hace meses ella sigue posteando, pero nunca más una imagen de la piscina o de entrenamiento. Hasta abrió una segunda cuenta de Instagram, que está enfocada en esta nueva pasión, fotografiar.
Desde Tokio, Delfina apareció algunas veces en la piscina, Hasta se tiró a nadar, pero entrenar, nunca más. Ni ganas, ni planes de hacerlo. La natación de Delfina Pignatiello terminó el 29 de julio de 2021. El anuncio de esta semana fue la confirmación de lo que todos los que acompañan la natación argentina más de cerca, ya sabían.
Faltaba el anuncio oficial, algo que los fans no querían, pero era inevitable.
Siempre es duro ver una deportista tan joven, con tanto potencial, finalizar una carrera que parecía apenas estar comenzando. A los 22 años de edad, es indudable que Delfina todavía tenía mucho para hacer. Por diferentes razones, pero principalmente por su voluntad, no será así.
La admiración e idolatría nos trae este sentimiento confuso en el que los fans se sienten parte de la carrera y muchas veces hasta de la vida personal de sus ídolos. Las redes sociales hacen todo eso aún más intenso. Con las redes, la relación es directa, los contactos también. No siempre agradables, Delfina sintió eso en la piel.
Es como esta nadadora prodigio, con tanto talento, tanto potencial no tuviese el derecho de decir que no va más.
Retirada Delfina ya estaba, ahora, sin embargo, ella va a poder dormir aliviada.